EDUCANDO PARA LA VIDA.

Mujer hojas de colores

 

Estos días antes de Reyes podía escuchar por la calle frases dirigidas a niñ@s como “si no eres buen@ no habrá Reyes”, “si sigues así, si haces eso, si no paras, si,…..no vendrán los Reyes/no tendrás regalos, este año no hay Reyes, etc.”

Reflexionando sobre estas amenazas educativas (esto es lo que nos han enseñado erróneamente) me preguntaba, ¿Cuánto tiempo llevamos usando estas amenazas?, ¿Dónde aprendimos que educar así nos lleva a lo que luego deseamos para l@s hij@s?

 

Estamos en el siglo XXI amenazando, haciendo sentir culpable, desvalorizando, repitiendo un no-educar para la vida fruto de épocas anteriores de oscuridad y desconocimiento.

¿Nos damos cuenta de las consecuencias de este no-educar para la vida? ¡Educar es tan difícil! Y el desconocimiento no repara las consecuencias.

Les educamos para sentirse culpables, sin autoestima, que desconfíen de lo que sienten y lo que piensan, desconectados de su sabiduria instintiva, con miedo a ser ellos, a opinar, a expresarse; los educamos para que si “son bueno@s” la vida, los Reyes, etc. los van a premiar, a regalar, a aplaudir. Y claro, la decepción es brutal.

Confundimos tener valores con ser buen@. Podemos decir que en esencia ser bueno significa dos cosas:
-Hacer lo que el otro quiere y desea.
-Doblegarse, someterse.

 

SI APRENDES BIEN A SER BUEN@:    pondrás al otro por delante de ti, las necesidades de los demás irán por delante de las tuyas, dependerás de los otros; tú no eres importante ni valorable, depende de lo que los demás opinen, lo que hagas por los demás, lo que digan los demás. No sabrás poner límites al abuso de los demás, los demás decidirán por ti; tienes todas las papeletas para entrar en relaciones de maltrato, de abuso en relaciones de pareja, amistad y laborales. No podrás expresar quien eres, tus necesidades, tus emociones, tu potencial ya que has aprendido que no eres importante ni valioso.
Tu mayor valor es ser buen@, someterte, obedecer sin pensar, ni cuestionar ni dialogar.
Y olvídate de tu creatividad, iniciativa, pasión, sabiduría instintiva, estarán atrofiadas y amordazadas dentro de ti.

Y resulta que esa es la base de los problemas de pareja, amistad, trabajo, malestar,… No te lleva a una vida sana.

 

EDUCAR EN VALORES ES OTRA COSA, tanto tú como el otro: respetas, sabes y sientes que eres importante, único; tus sentimientos son importantes; la amistad, colaborar, expresarte, comunicarte, dialogar, manejar tus emociones, respetar, poner límites, cuidarte, darte el descanso y la nutrición que necesitas, distingues tus necesidades de las de los demás,..
Cuando te encuentras a alguien que te trata mal, sin respeto, sabes reconocerlo y poner límites. Puedes sentir esa sensación interna del entusiasmo por vivir, por expresar tu creatividad y la riqueza de tu sabiduría instintiva.

 

No te educaron para ser Rey/Reina de tu vida, de tu territorio, sino bajar la cabeza, callar, obedecer y ser buen@, y aprendes a hacerlo tan bien, con tanto éxito, que te queda la queja, ser víctima de las injusticias de la sociedad, de los otros. ¡Muy triste y doloroso!

Esos errores inconscientes, sin querer, esas tontas meteduras de pata, tienen tantas consecuencias nefastan. Como padres, queriendo tanto a los hij@s , sin darnos cuenta, estas meteduras de patas dan problemas a lo largo de la infancia, pasando en muchos casos desapercibido, y en la adolescencia se agrava, y seguimos sin verlo, mientras no hagan mucho ruido y sean buen@s…..
Y entonces llegan los 18, 19 y la época de los 20 y ya no hay manera de sostener el caos interno, el daño.
Y entonces, no entendemos que ha pasado: ¿Qué ha pasado? ¿Dónde se torció el camino? ¿Cómo llegamos hasta aquí?:   con esas meteduras de pata repetidas: “se buen@ y todo irá bien, obedece y se te querrá, se buen@”.